Hermanita
canina:
doce años y nueve meses se pasaron volando,
nunca
pensé que te irías en este mayo,
te
extraño, todos te extrañamos
y te seguimos amando y recordando.
Siempre
vivirás en nuestro corazones mi pitufi guau guau,
mi
gumer, mi pupuchurra canina,
sólo
decías gua, y un solo gua,
cuando era estrictamente necesario,
extraño
papacharme contigo,
extraño tus lametones, extraño
al llegar a casa
y no
ser recibida con ese super beso en la boca,
que una
vez me rompió la nariz por la emoción...
ahora
me miro al espejo y te tengo conmigo siempre...
extraño
tus travesuras y picardías,
mi amor
canino, te extraño un montón.
Gracias
por regalarme ese arco iris del sábado,
te lo
pedí para saber si estabas bien, y lo estás...
Mi
muñeca hermosa, espero que cuando me llegue la hora,
estés
lista para recibirme con ese super beso de bienvenida,
ese
super recibimiento que prodigabas
sin
importar si eran cinco minutos, una hora,
un día,
semanas o meses... ahora serán años...
Mi alegría
se ha ido contigo, no hago sino llorar,
tengo
un vacío enorme en mi alma y en mi corazón...
Inachin
sinverguenzín:
Gracias
por tu compañía, por tu afecto,
tu amistad, tu hermandad,
Gracias
por ser parte de mi vida, gracias por tanto amor...
Perdónanos
por interrumpir tu sufrimiento...
Le
pregunto a Dios ¿Porqué la enfermedad?
Que
prueba tan dura para todos,
para
quien la padece y su círculo de afectos y cuidados.
Inashi
juega con todos los perritos que están en el cielo.
Gasú
primero, Gasú segundo, Pilín, Cuqui e Inachin...:
Gracias
por ser parte de mi vida,
de mis
afectos y de mis recuerdos....
gracias
mis amadas mascotas
por
tanta alegría, juego, ternura y felicidad.