Pesebre de la Iglesia de San Francisco en el centro de Bogotá
Pesebre de la conmemoración de los 800 años del primer belén, gracias a los Franciscanos por hacerme amar aún más la Navidad y por hacerme conservar esta devoción tan hermosa de la novena de navidad, el pesebre, gracias por la biblia bellísima que me gané en la rifa del 24 de diciembre de 2023, una de las navidades más especiales de mi vida... recordar la bellísima tradición de los pesebres con personas, la misa de navidad fue muy hermosa, sobria y especial
Mis padres me enseñaron a amar la navidad, se le escribía
una carta al Niño Dios, hacíamos la novena, el piano llegó a los 6 años por el
Niño Dios, yo pedí una organeta y el Señor Jesús llegó con un piano!!!
Mi papá tocaba y cantaba los villancicos en el piano, hacíamos el
pesebre y el árbol, mi mamá nos puso hacer tamales! Natilla! Los buñuelos los compramos siempre!!! Se jugaban a los aguinaldos!
En agosto de 2014 la navidad se transformó con la muerte de mi
padre.
Voy a la Iglesia de San Francisco que es recordar a mi
padre... Y en 2014 por primera vez participé en una novena de navidad en una
iglesia y le di gracias a Dios porque continuamos con la novena en mi casa,
soñé con mi papá y me dijo que continuara celebrando la navidad como siempre lo
hacíamos, con mucha alegría y mucho color, fue una terapia para el duelo y a la vez fue brutal el vacío de esa
primera navidad y ese año nuevo sin él.
Soy franciscana de corazón cerca o lejos siempre llevaré en mi mente, mi alma y mi corazón a los franciscanos y a la Iglesia de San Francisco, mi padre me llevaba cuando era pequeña, y en la universidad y luego de la universidad y cuando caminábamos y entraba mi Padre a rezar y orar a San Francisco, gracias Papá por esos momentos porque buscándote llegué a San Francisco de nuevo y haciendo honor a su nombre, el Convento de la Purificación me purificó y me hizo cada día amar más y más nuestra hermosa fe católica.
Desde 2014 son dos novenas... La de mi casa y la de la
Iglesia San Francisco tan llena de ternura y de dulzura!
En el Templo de San Francisco rezo
y lloro la novena de navidad.
La novena de navidad del Templo de San Francisco
en Bogotá es una novena donde en realidad se está esperando y preparando la
llegada de un bebé, de un niño, del niño más hermoso del mundo: el Niño Dios,
Jesús hecho hombre, como un bebé.
El reino de los cielos dijo Nuestro Señor es para quienes
son como los niños!
La novena tradicional, busqué y encontré la original, la que rezamos siempre, está viejita y usada, la digité porque veo que le han cambiado
el contenido, hay muchas versiones, solo falta que publiquen una novena donde el protagonista no sea el Niño Dios al paso que vamos!!!
Y los villancicos tradicionales con los que crecimos muchas
generaciones y que los niños y niñas todavía cantan y que nosotros todavía cantamos y cantaremos si Dios permite.
La novena de navidad es donde confluyen todas las
generaciones de las familias: desde 1 día hasta los 120 años, une, reúne y
ojalá fuera sin pólvora y todas esas cosas de los "adultos" que
distraen del verdadero amor: el que da paz y tranquilidad, la vida en
abundancia y la bendición de Dios que es la familia.
La indulgencia por los 800 años del pesebre fue también una vivencia espiritual muy especial, fui varias veces, la más especial fue cuando fui a rezar el rosario para encomendar con lágrimas y oraciones, a los que amo con el alma y el corazón y que ya no están en este plano material y terrenal al Niño Jesús, a María Santísima, a San José y a San Francisco de Asís.
A dar gracias a Dios y a aceptar al fin su santa y sagrada voluntad.
Sólo puedo decir que Dios como Dios, siempre es sabio e infinita su misericordia y tomó la mejor decisión, el tiempo le dio la razón a Dios padre todopoderoso.