miércoles, 28 de abril de 2021
lunes, 5 de abril de 2021
Fray Gabriel Gutiérrez Ramírez: solo bondad y misericordia in memorian
Qué
tristeza más grande la partida
de Fray Gabriel Gutiérrez Ramírez (q.e.p.d.)
Fray Gabriel era:
Amor en acción.
El Padre
Gabriel era inmensa bondad y misericordia.
A su
memoria y a la Iglesia de San Francisco y
a los
frailes franciscanos: nuestra solidaridad,
un enorme
respeto e infinita gratitud.
El amarillismo y la estigmatización son
ajenos al amor inmenso que siempre dio.
Dios está
feliz por tener con Él,
a una
extensión maravillosa de su infinito Amor...
Al Padre
Gabriel Gutiérrez Ramírez,
Dale Señor
el Descanso Eterno,
Que brille
para Él la Luz Perpetua.
Les
comparto la Oración a Nuestra Señora de los Desamparados del Templo de la
Tercera, conocí esta advocación por el Padre Gabriel, un sacerdote que amó
muchísimo a nuestra querida Bogotá:
Ampáranos
Señora y Madre Nuestra,
ampara
nuestras familias,
a nuestros
pueblos, a nuestra patria,
a nuestro
mundo actual.
Aleja
guerras y discordias.
Une los
corazones divididos con
la alegría
de sentirnos junto a tí,
hijos
tuyos.
Da a los
que tienen y pueden,
ojos de
misericordia,
y corazón
abierto.
Da a todos
pan, abrigo, amoroso hogar,
da salud a
los enfermos,
paciencia
en el dolor a los que sufren,
consuelo a
los tristes,
ilusiones a
quienes las han perdido,
aparta de
las mentes el error,
y de los
corazones la debilidad,
mueve a los
pecadores a volver en sí,
y a los
justos a virtud más alta.
Haz que
vivamos cantándote,
y que
vayamos con tu nombre en los labios,
a
contemplarte en la gloria,
junto a su
hijo Jesucristo, y junto con el Padre,
y el
Espíritu Santo,
Vive y
reina por los siglos de los siglos Amén.
Dios que
nos haz otorgado la gracia de venerar a la
Santísima
Virgen María con el Dulcísimo título de Madre de los Desamparados
Concédenos
a nosotros tus siervos, que puestos bajo la protección de tal Madre, nunca nos
veamos desamparados de tu benignidad, por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.
Templo de la Tercera
Pd. Fray Gabriel voy a extrañar ese afecto entrañable que tenía por todos nosotros l@s feligreses de San Francisco y su voz tan cálida y amorosa, siempre bendiciendo, desde el Cielo siga bendiciéndonos y orando por Bogotá. Fray Gabriel nos enseñó que las cosas de Dios son sencillas y simples, que las cosas de Dios nos dan inmensa tranquilidad y a servir a los más pobres de los pobres.
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