Este año ha sido un recordar, repasar, ver, organizar, clasificar y comprender mi
historia, mis raíces, valoro el viajar, las fotografías, disfrutar la vida y
sobre todo compartir con mi familia como una parte importantísima del legado
que nos dejó mi amado padre.
Esta pequeña, vital e intensa familia que mi padre formó con mi madre viajó
muchísimo durante 45 años. Las primeras fotos de mis padres, antes de que mi
hermano y yo naciéramos son viajando.
He encontrado unos tesoros visuales bellísimos, de tantos y
tantísimos viajes, sigo buscando, encontrando y dando gracias a Dios por tan
hermosos recuerdos, no es imaginación, no fue irreal todo lo que vivimos, el
enorme álbum familiar es una hermosa bitácora visual y vital.
Los viajes, el mar, nadar, nadar en el mar, disfrutar las
vistas, caminar, degustar deliciosas comidas y bebidas, descubrir rincones y
sitios mágicos de las ciudades y pueblos de nuestro Caribe y de nuestra
Colombia son parte de mi tesoro sagrado, son parte del legado que nuestro amado
Carlín nos dejó, Carlín nos dejó muchísimos recuerdos.
Mi madre me enseñó a leer, a escribir, a sumar, restar, dividir y multiplicar. Tú Carlín me enseñaste a nadar, me enseñaste a amar la música, ambos me enseñaron a caminar y ahora me doy cuenta que el gusto por viajar se lo debo a mis amados padres, corre por mis venas. Carlín tu eras un nómada de verdad.
Mi amado Carlín como te gustaba callejear, compartir, charlar, viajar... Carlín tu eras un andaluz de corazón, te gustaba la fiesta, el buen vino, la buena mesa, una buena charla al igual que los dos maestros andaluces de la paz que están contigo también en el Cielo.
Carlín por amor a tus hijos y a tu Carlotín cuantos cosas
maravillosas, locas y joviales hiciste, la juventud se lleva definitivamente en
el alma, en el espíritu y en la mente y lo que más te inyectaba juventud y
energía fue el AMOR.
Carlín continúo aprendiendo contigo mi amado padre y de
verdad que la libertad es un elemento esencial y valioso entre mi madre y tú.
Este tiempo ha sido un tiempo de amor y de bendición, un tiempo de gratitud, un tiempo de valorar, un tiempo de revisar, un tiempo de contextualizar y un tiempo de dar a cada persona, relación y situación el lugar que le corresponde, ha sido un tiempo de probar lo sincero y lo que no lo es, en la línea espiritual que llegó a mi vida con tu partida, ahora es inadmisible lo mediocre.
Este ha sido un tiempo de ver lo esencial con los ojos del corazón y lo esencial Carlín en esta prueba vital que está viviendo la familia que amaste es esa: el AMOR.
Viviste tu vida A TU MANERA y mi madre, mi hermano y yo fuimos tu elección vital más libre y la libertad es amor.
El AMOR nunca MUERE, el AMOR se regocija con la VERDAD, lo dice sabiamente San Pablo a los Corintios: SIN AMOR NO SOMOS NADA.
Tú mi amado CARLÍN fuiste AMOR, verdadero AMOR.
Papi no me da pena decirlo, no me importa la edad que yo tenga, no me importa gritarlo a los cuatro vientos, ¡Siempre tendré papitis! ¡Quiero a mi papá!
Y otros amigos y amigas también tienen papitis y otros tienen mamitis y otros tienen papitis y mamitis, nos hacen falta nuestros padres, sabemos que están bien en el cielo, más los extrañamos un montón y nos hacen mucha falta aquí en la tierra.
Te amamos y te amaremos por
siempre nuestro amado Carlín
